Los animales siempre nos acaban sorprendiendo...Desde Japón nos llega la historia de Yosuke, un loro gris africano, que un dia decidió escaparse de su jaulita y darse una vuelta por la ciudad pero....¡No sabia volver a casa!
La policía de la ciudad le encontró y, tras pasar una noche en comisaría,fue entregado a un hospital veterinario. Alli, además de deleitar al personal con un amplio repertorio de canciones, comenzó a parlotear hasta indicarles, claramente "Yo soy el señor Yosuke Nakamura".
Pero sus indicaciones no quedaron ahí. Yosuke les repitió varias veces una dirección, con el nombre de la calle y el número. Los empleados del hospital avisaron a la policía, que pudo comprobar que en esa dirección, efectivamente, residía la familia Nakamura, propietaria del avezado loro. Gracias a su memoria y su inteligencia, Yosuke pudo volver a casa.
La policía de la ciudad le encontró y, tras pasar una noche en comisaría,fue entregado a un hospital veterinario. Alli, además de deleitar al personal con un amplio repertorio de canciones, comenzó a parlotear hasta indicarles, claramente "Yo soy el señor Yosuke Nakamura".
Pero sus indicaciones no quedaron ahí. Yosuke les repitió varias veces una dirección, con el nombre de la calle y el número. Los empleados del hospital avisaron a la policía, que pudo comprobar que en esa dirección, efectivamente, residía la familia Nakamura, propietaria del avezado loro. Gracias a su memoria y su inteligencia, Yosuke pudo volver a casa.
Yosuke el juerguista.
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